top of page
Terapias combinadas para una Vida Plena
Buscar

Una respuesta que permite todo tipo de matices y que muchas veces es incontestable.


El ser humano puede ser una mezcla de lo que cree ser, lo que los demás creen que es, y lo que realmente es. Hoy en día, hay que añadir lo que internet, y sobre todo las redes sociales, dicen que somos.


¿Quién eres?
¿Quién eres?

Lo que somos cambia cada instante gracias a nuestro aprendizaje, errores, metas, frustraciones, emociones,...


Somos nuestras vivencias, proyectos, mezcla de sentimientos, de relaciones, de acciones, etc.


Y, sobre todo, somos camino, trabajo, esfuerzo, un descubrimiento, un cuestionamiento y como dice Thomas Szasz: somos lo que creamos.


«A menudo las personas dicen que aún no se han encontrado a sí mismas. Pero el sí mismo no es algo que uno encuentra, sino algo que uno crea». Thomas Szasz


Ocuparse de uno mismo significa, muchas veces, dejar de esperar que los demás cambien.


Intenta no cambiar al otro, ya que es imprescindible que el otro lo quiera hacer y es algo, que por mucho que te pese, no depende de ti.


Con frecuencia ese querer cambiar a la otra persona se ve claramente en las relaciones de amistad, las familiares y, sobre todo, en las relaciones de pareja: uno de ellos o los dos anhelan que el otro cambie, que entre en razón, que les ame como esperan, etc. Sin embargo este tipo de anhelos no acaban sucediendo.


Detrás de esos reclamos uno ha de preguntarse:

¿Qué me falta?

¿Qué escondo?

¿Qué me pasa?

¿Por qué lo hago?

¿Con qué intención?

¿Desde dónde ?


Detrás de esas exigencias ha de haber un trabajo, un respeto hacia el otro, un pensar que el otro es distinto a nosotros. En muchas ocasiones, es necesario un acompañamiento terapéutico para que la persona sea consciente de que hay un problema que debe afrontar.


Si empiezas cambiando tú sin esperar que el otro lo haga, el agua estancada seguramente empezará a circular, a limpiarse, a moverse,... Si tu cambias, el sistema cambia. Si empiezas a comportarte de manera distinta con el otro, es probable que también cambie su forma de actuar contigo.


¿Por qué no lo pruebas?



ree
Ocuparse de uno mismo



La piel, de no rozarla con otra piel

se va agrietando...


Los labios, de no rozarlos con otros labios

se van secando...


Los ojos, de no mirarse con otros ojos

se van cerrando...


El cuerpo, de no sentir otro cuerpo cerca

se va olvidando...


El alma, de no entregarse con toda el alma

se va muriendo.


Bertolt Brecht


La piel, de no rozarla con otra piel  se va agrietando
El alma

Suscríbete a nuestro blog

¡Gracias!

  • Youtube
  • Whatsapp
  • Icono negro LinkedIn
  • Instagram

             Psicoterapeutas | Psicoanalistas | Terapeutas integrales

  Psicóloga en Barcelona 

© 2025  Vida Plena |

bottom of page